24 de mayo de 2012

¡Pago cien mil dólares por voto!

Dicen que cheque mata galán, y si es un cheque grande, más aún debería ser, por lo que si a populismo vamos, he aquí mi megaoferta electoral:
Si me eligen presidente les entregaré, a cada uno de los que votaron por mí, por concepto de honorarios electorales bien ganados, un bono por cien mil dólares emitido por la República Bolivariana de Venezuela, con vencimiento de un año...y al rato renuncio a favor de mi Vicepresidente, aún secreto, para que ustedes mismos se encarguen de tratar de cobrarle el bono Kurowski.
De repente, con ese golpe de Estado populista, podría insuflarle a nuestro poblado lo que necesita para convertirse en nación.
Y sólo por el hecho de que los ofrecimientos de los demás candidatos sean menos generosos que el mío... ¿eso los hace menos populistas? Es más, si vamos a pecar por populistas mejor que pequemos de verdad-verdad, para así ver si así de repente logramos salirnos de eso una vez por todas.
Ya quisiera yo ver esa reunión de acreedores de la nación, donde de hecho los ciudadanos estarían cobrándole al Estado lo que el Estado ha malgastado de lo suyo durante décadas. Es que ya oigo a mis sucesores buscando un arreglo..."Pero bueno, si el Estado representa a ustedes mismos los ciudadanos"... y a los tenedores de bonos Kurowski respondiéndoles, al unísono, "ese cuento se acabó".
Lo que sí lamento, algo, no demasiado, es por los actuales acreedores de la República, quienes quedarían bastante diluidos con esta emisión de bonos Kurowski... pero quién les manda a meter sus reales en un país de populistas como yo.
Y si luego aseguramos que el bono Kurowski quede cancelado con el derecho a que las resultas petroleras se le entreguen directamente a los ciudadanos, y el Estado se financie exclusivamente con lo que los ciudadanos le cancelen en impuestos, entonces sí sé que habré ayudado imponer una democracia real en mi país.
Es más, de repente puede que, en agradecimiento, hasta me coronen Per I, por supuesto solo como rey figurín, sin mando alguno... pa que no invente echar todo aquello pa tras, ofreciendo pagar otro bono.
¡Austeridad petrolera!
En el mundo las discusiones entre la "austeridad" y el estímulo se están haciendo cada día más intensas, por aquello de necesitarse tanto de recortes de gastos y aumentos de impuestos para reducir déficits fiscales, como del crecimiento económico que pueda generar empleos e ingresos fiscales. No obstante, donde la austeridad sí está logrando avanzar, sin debates y sin nadie que se le oponga, es en el consumo de petróleo. ¡Que nos agarren confesados!
Si como en una democracia que se respete, los candidatos tuviesen que debatir, una pregunta obligatoria sería: ¿cuál sería su respuesta económica de llegar el barril de petróleo a valer "solo" unos 50 dólares?
Y roguemos porque los otros dos candidatos no respondan como el populista Kurowski, quien, ante las dificultades, tendría que aceptar, muy a regañadientes, tener que recortar el bono Kurowski, de cien mil, a solo ochenta mil dólares.
¡Traición!
No soy magistrado, ni siquiera un letrado en leyes pero, pa mí, el haber dividido en lugar de unido al país, el haber llevado a la N potencia nuestra dependencia del petróleo y el haberse robado mucho y malgastado más de la más inmensa bonanza petrolera vista, sin siquiera haber bailado como se debería haber bailado al país, equivale, para todos los fines prácticos si no legales, a una traición gubernamental a la patria... y creo que pa ti también.